La limpieza de un colchón es un tema que a priori se puede tomar a la ligera, sin embargo es de gran importancia dado que por ejemplo, uno no es plenamente consciente de la cantidad de ácaros y bacterias nocivas para nuestra salud. Puede parecer un disparate pero en un colchón estándar el número de ácaros que alberga oscila entre 100.000 y 1.000.000. Alergias, congestión nasal e insomnio son algunos de los efectos directos que tiene una mala higiene del colchón.
Los expertos en descanso recomiendan jubilar el colchón aproximadamente cada 10 años, esto es una aproximación estándar, ya que en función de la calidad del colchón será necesario cambiarlo antes o después. Pero durante estos diez años está en manos de cada uno llevar a cabo una serie de limpiezas periódicas con el fin de optimizar la vida y duración del mismo.
Son muchos los percances que un colchón puede sufrir a lo largo de su vida, desde manchas por causa de la comida, hasta derramamiento de líquidos, pasando por la mera acumulación de polvo. Según datos facilitados por la Asociación Española de la Cama, en España un 68% de las personas no cambian su colchón a menos que el deterioro comience a verse desde fuera, esto suele ocurrir entre los 11 y los 13 años y varía en función del cuidado con el que hayamos tratado al mismo. Si buscamos que el colchón duré los máximos años posibles y se conserve de la mejor manera es necesario seguir al pie de letra las recomendaciones que los propios fabricantes de colchones indiquen y en la medida de lo posible, utilizar uno de estos equipos.
Los ácaros al morir dejan su esqueleto en el colchón, lo que puede causar problemas de respiraciónExiste una creencia común que dice que es recomendable no hacer la cama o en su defecto esperar algunas horas antes de ponerse a hacerla. Esta teoría carece de fundamento alguno, si bien es cierto que una buena ventilación de la habitación ayudará a eliminar ácaros del colchón. En este punto es conveniente explicar que los ácaros son artrópodos, lo que quiere decir que al morir dejan su esqueleto en las sábanas, almohadas y colchones, lo que dificulta mucho el sueño a las personas con algún tipo de alergia.
Es recomendable limpiar las sábanas al menos una vez por semana, de esta forma se evitará que los restos de los ácaros permanezcan por mucho tiempo.De la misma forma es recomendable limpiar y desinfectar el colchón aproximadamente una vez cada mes, dado que es el componente de la cama que más de estas bacterias almacena.
Efectos nocivos de los ácaros
Los ácaros son una serie de arácnidos de tamaño prácticamente microscópico que se instalan en los colchones y de manera muy fácil pueden atravesarlo y alcanzar nuestras sábanas, de tal manera que los cambios periódicos de las sábanas no evitan su efecto del todo. Comúnmente la alergia a los ácaros viene dada por dos razones: Por la presencia de los propios ácaros o por la presencia de sus excrementos.
El picor de ojos, el insomnio y el dolor de garganta son algunos de los síntomas de la presencia de ácarosLos típicos síntiomas de la presencia de ácros suelen ser picor de ojos estornudos, asma, tos, moqueo, dolor de garganta entre otros. Además, en el caso de que el colchón tenga más de 10 años de antigüedad, es posible experimentar problemas cutáneos, jaquecas o falta de sueño.
Consejos para limpiar el colchón
Antes de ponerse manos a la obra es necesario comprar algunos elementos que ayudarán a limpiar el colchón. Serán necesarios: Un vaso de bicarbonato de sodio, un recipiente de plástico con tapa, un colador o un tamiz y 5 gotas de aceite esencial del árbol del té. En primer lugar hay que retirar las sábanas del colchón y llevarlo a un lugar donde haya luz solar y donde uno pueda moverse con facilidad. El bicarbonato de sodio puede parecer un poco extraño, sin embargo, es necesario para acabar con la humedad y para terminar con todo tipo de bacterias además, claro está, de los propios ácaros.
El aceite esencial de árbol de té es uno de los desinfectantes naturales más potentes que existenPor otro lado la utilización del aceite esencial de árbol de té es importante debido a que es uno de los desinfectantes naturales más eficaces que existen, se puede comprar fácilmente en tiendas naturales o herbolarios y también será muy útil en el día a día, por no hablar del agradable olor que dejará en tu colchón. El proceso de limpieza es el siguiente: En un bol de plástico hay que echar el bicarbonato, añade las cinco gotas de aceite esencial de árbol de té y mézclalos hasta conseguir una masa homogénea.
Acto seguido, hay que hacer uso del tamiz, que ayudará a repartir de manera uniforme y controlada todas la mezcla por el colchón. Es importante hacerlo por ambas caras del mismo. Y ya solo quedaría pasar la aspiradora por el colchón con el fin de retirar toda la suciedad que se ha quedado adherida a la mezcla de bicarbonato y aceite esencial de árbol de té.
